Un bebé palestino murió quemado vivo y sus padres y hermano resultaron heridos de gravedad cuando colonos israelíes prendieron fuego a su casa en Cisjordania, un ataque calificado de «terrorista» por Israel. Un joven murió tras protestar por el crimen.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) desalojaron por la fuerza a un centenar de colonos de las ruinas del asentamiento judío de Sanur, en el norte de Cisjordania, y en el que llevaban dos días de protesta en el décimo aniversario de su evacuación por Israel.
Según informó la emisora de radio pública Kol Israel, horas antes, alrededor de veinte familias de colonos abandonaron el lugar voluntariamente.
El Gobierno de Estados Unidos se mostró «muy preocupado» por el anuncio de Israel de que construirá 300 viviendas en el asentamiento judío de Bet-El, en Cisjordania, y puso en duda el compromiso israelí con una solución negociada al conflicto con los palestinos.
En un comunicado, el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner, dijo que la expansión de los asentamientos israelíes «amenaza» la fórmula de dos Estados y «pone en cuestión el compromiso" de Israel con una solución negociada al conflicto.
Israel rechazó una advertencia reciente del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, de que si el Congreso bloquea el acuerdo nuclear con Irán, la comunidad internacional podría culpar a Israel del fracaso.
El ministro israelí de Energía, Yuval Steinitz, afirmó que Israel no será presionado para que deje de expresar sus críticas sobre el acuerdo.
Israel y la Autoridad Palestina (AP) abordaron la posible reanudación del proceso de paz sin avisar a Estados Unidos, informó el diario «Haaretz».
El encuentro del vice primer ministro israelí, Silván Shalom, y el jefe de los negociadores palestinos, Saeb Erekat, se celebró el jueves pasado en Ammán con la participación de un mediador.
«Los estadounidenses merecen algo mejor», dijo el presidente Barack Obama al criticar a los precandidatos republicanos a la presidencia Mike Huckabee, Donald Trump y Ted Cruz por comentarios que «serían ridículos si no fueran tan tristes".
En sus primeras declaraciones acerca de la competencia por definir a quien lo sucederá, Obama acusó a los precandidatos de violar una añeja tradición estadounidense de no ser «irresponsables e imprudentes» en asuntos delicados como la polí¬tica exterior.
Estados Unidos y Reino Unido intentan calmar las preocupaciones generadas en varios países tras el acuerdo nuclear con Irán, mientras el guía supremo iraní, Alí Jamenei, aconsejó una cierta desconfianza de cara a algunas grandes potencias presentes en las negociaciones.
En una carta al presidente iraní, Hassan Rohani, el guía supremo reconoció que la firma del acuerdo supone un «paso mayor», pero le instó a que «tenga cuidado de que las otras partes no violen el compromiso».
Luego del acuerdo alcanzado entre Irán y el Grupo 5+1, el ministro de Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, fue más allá del pacto sobre el programa nuclear y aseguró que las potencias occidentales y Teherán incluso pueden abordar los desafíos comunes, como la amenaza del Estado Islámico (EI) en Oriente Medio.
El diplomático persa sostuvo que la lucha contra el EI puede ser parte de una cooperación más amplia con Occidente, que puede incluir los ámbitos del comercio y las finanzas.
En un intento por convencer a legisladores y a la opinión pública de su país para aceptar el pacto, Barack Obama se dirigió a la nación en una conferencia de prensa.
El acuerdo con Irán evitará una carrera nuclear y más guerras en Oriente Medio. Ese fue el principal argumento que Obama usó para defender el pacto alcanzado.
«Sin un pacto, no habría límites para el programa nuclear e Irán podría fabricar una bomba. Sin un pacto, nos arriesgamos a más guerras en Oriente Medio», aseguró.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que el acuerdo alcanzado entre las potencias mundiales y Teherán sobre el programa nuclear iraní abre la vía al cambio Oriente Medio.
«Este acuerdo ofrece una oportunidad de avanzar en nuevas direcciones. Debemos aprovecharla», aseguró Obama desde la Casa Blanca.