«Israel rechaza completamente el acuerdo que se está perfilando en Ginebra entre el Grupo 5+1 e Irán sobre su programa nuclear», afirmó el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, en su encuentro con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry.«Es un acuerdo muy malo. Israel lo rechaza totalmente», señaló Netanyahu durante la reunión llevada a cabo en el en el aeropuerto Ben Gurión, añadiendo que a Irán se le está otorgando «el acuerdo del siglo».
Las tensas relaciones entre Estados Unidos e Israel parecen haber llegado a su punto de hervor. Netanyahu y Kerry ni siquiera se fotografiaron juntos durante el encuentro.
El líder hebreo dijo que aceptar la propuesta que Teherán presentó a las grandes potencias es un «error histórico».
«Esta propuesta permite a Irán conservar la capacidad de fabricar armas nucleares. Creo que aceptarla es un error de magnitud histórica. Se debe rechazar de inmediato», añadió.
Netanyahu advirtió que la oferta de las potencias internacionales «enterraría la posibilidad de una resolución pacífica» en relación a la industria nuclear iraní.
«En todo caso, Israel sigue reservándose el derecho de defenderse a si mismo, por sus propios medios, contra toda amenaza», aseguró.
Kerry tiene previsto participar en las negociaciones con Irán de este viernes en Ginebra. Un portavoz del Departamento de Estado norteamericano adelantó que el canciller hará «todo lo que pueda» para acercar posturas con Irán y resolver las dudas sobre su industria atómica.
Por su parte, la Casa Blanca aseguró que Estados Unidos e Israel comparten el mismo objetivo en relación al programa nuclear iraní.
«No hay ninguna divergencia entre Israel y Estados Unidos, entre el presidente Obama y el primer ministro Netanyahu, sobre el objetivo de impedir que Irán se dote de armas nucleares», dijo el portavoz del Ejecutivo estadounidense, Jay Carney.
«Todas las opciones para lograr ese objetivo están sobre la mesa», agregó Carney durante su conferencia de prensa diaria.
En las negociaciones que se llevan a cabo en Ginebra figura una propuesta presentada por Irán a cambio de que se suavicen las sanciones económicas occidentales.
Carney explicó que la «primera etapa se refiere a las actividades nucleares más avanzadas, mejorar la transparencia, para que Irán no pueda hacer progresar su programa durante las negociaciones, y organizar un plazo necesario para la negociación de un acuerdo global».
«A cambio de medidas concretas y verificables, el Grupo 5+1 considerará una flexibilización dirigida de las sanciones que no afectará la estructura central de las sanciones», agregó Carney, sin dar más detalles sobre la naturaleza de las posibles concesiones a Teherán.
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