La tensión reina esta semana en Cisjordania. Ante la próxima visita del presidente Obama a la zona, tanto el Gobierno israelí como la Autoridad Palestina (AP) tratan de no perder el control de la situación para que no derive en lo que podría ser una nueva Intifada.

El tema de los presos palestinos en Israel, la retención israelí de impuestos correspondientes a la Autoridad Palestina, la difícil situación económica de la AP y su pésima relación con Hamás, además de una amplación de asentamientos judíos o la planificación y construcción de nuevos, entre otros muy importantes asuntos, podrían ser el factor de una nueva escalada de violencia.
  
La reacción del Gobierno israelí saliente al reconocimiento de Palestina en la ONU como Estado observador no miembro, fue anunciar la construcción de nuevos asentamientos en Cisjordania en la zona conocida como E1, algo muy poco alentador para que Obama consiga reanudar las negociaciones.

También el hecho de que Israel se encuentre en medio de la formación de un nuevo Ejecutivo, sin mayores éxitos por ahora, no contribuye a la estabilidad de la región.

Uno de los principales temas de debate entre la Administración Obama y el próximo Gobierno hebreo, será el futuro de los asentamientos judíos, factor por el cual los palestinos se niegan a reanudar las tratativas.

Conviene entonces aclarar algunos términos actuales relacionados con dicho asunto.

¿Qué es el E1?

E1 es sinónimo de Este (oriente) 1 y marca el territorio que el gobierno israelí programó para la construcción de asentamientos en Cisjordania. Se trata de un area de 12 kms2 y cuando la edificacióm esté terminada alcanzará las afueras de Jerusalén.

La construcción en E1 sería una ampliación del mayor asentamiento israelí en Cisjordania, Maalé Adumim, con cerca de 40,000 habitantes, y lo uniría con la zona metropolitana de Jerusalén.

¿Por qué el plan provocó una reacción internacional tan intensa?

Después del voto de la Asamblea General de la ONU para otorgar a Palestina la categoría de Estado observador no miembro, Israel anunció la construcción de 3.000 nuevas viviendas en Cisjordania y agregó que la mayoría de ellas se edificarían en E1.

La AP afirmó que la construcción en ese lugar esencialmente partiría Cisjordania en dos e impediría el acceso de sus habitantes a Jerusalén Oriental, a la consideran como capital de un futuro Estado palestino y a los Lugares Santos que Israel se comprometió a mantenerlos abiertos a creyentes de todas las religiones monoteistas.

¿Cuántos asentamientos israelíes hay en la zona?

Según el monitoreo realizado por organizaciones de derechos humanos, en la actualidad existen 137 asentamientos israelíes en Cisjordania, con unos 325,000 habitantes en total. Los hay de distintos tamaños. Muchos de ellos, como Maalé Adumim, son semejantes a cualquier otro poblado israelí, y cuentan con todos los servicios: supermercados, centros comerciales, culturales, de educación, de diversion, deportivos y hasta una universidad.

¿Cuál es su estatus legal?

El estatus de los asentamientos se encuentra bajo disputa. La ONU y numerosos expertos en derecho internacional los consideran ilegales. El Gobierno de Israel y varios eruditos en la materia afirman que son totalmente legales. La AP quiere que Israel renuncie a la mayoría de ellos como parte de cualquier futura solución de dos Estados, aunque muchos creen que no será posible teniendo en cuenta el tamaño de algunos.

¿Los asentamientos afectan al proceso de paz?

Los asentamientos son una de las principales razones por la que no hubo negociaciones entre israelíes y palestinos en los últimos dos años y medio. La AP aseguró que sólo reanudará las tratativas si Israel congela toda la construcción. El Gobierno de Netanyahu, en cambio, exige que las negociaciones no tengan condiciones previas.

La disputa por la nueva construcción en el sector E1 le agrega más leña al fuego. El Consejo de Seguridad de la ONU cree que ello podría destruir cualquier posibilidad de una solución de dos Estados.

¿En qué se verán afectados los palestinos por el desarrollo de E1?

Para los palestinos las preocupaciones son inmediatas. Analistas logísticos sostienen que dicho proceso llevará, entre otros problemas, a más desviaciones y cierres de carreteras existentes. Según ellos, un viaje de Hebrón a Jericó podría extenderse a varias horas.

¿Qué hay de los israelíes que actualmente viven cerca de E1?

El alcalde de Maalé Adumim, Benny Kashriel, por ejemplo, se muestra feliz por la posibilidad de ampliación; un proyecto que está esperando desde hace años.

«E1 está en la municipio de Maalé Adumim y es tierra del Gobierno israelí. Se debe edificar allí para nuestras parejas jóvenes», declaró.

En síntesis, Albert Einstein tuvo razón cuando dijo que no se pueden solucionar problemas pensando de la misma manera que cuando fueron creados.

El verdadero interrogante es si alguien todavía se muestra dispuesto a resolverlos.