Israel es conocido por ser uno de los lugares más convenientes para hacer autostop en el mundo. La mayoría los cruces principales cuentan con un refugio y están bien iluminadas durante la noche. Esta es una forma incomparable de conocer e interactuar con los lugareños. Un signo puede ayudar (pon un pedazo de papel en blanco dentro de una funda de plástico, y con un marcador de tinta no permanente tendrás una señal autostop reutilizable). Cuando hagas autostop, extiende la mano en lugar de un dedo pulgar, con 1 o 2 dedos extendidos, señalando el camino. Para viajes cortos, los dedos deben apuntar al suelo. Los conductores de zonas aledañas pueden apuntar hacia abajo al pasar, lo que indica que no van muy lejos de allí.

En términos generales, el autostop en las zonas urbanas es menos popular que en otras partes de Israel. Es más aceptada en las zonas rurales, sobre todo, en las escasamente pobladas, como los Altos del Golán, que tienen escaso sezvicio de autobús.

Los turistas deben tener en cuenta que el Ministerio de Asuntos Exteriores británico considera que “hacer dedo” en Israel es algo peligroso, al igual que en muchos otros países de Europa y Oriente Medio. Este consejo se aplica específicamente a los turistas; no constituye un comentario sobre la seguridad del autostop para la población local y no se aplica particularmente a Israel.

Los pobladores de Cisjordania dependen en gran medida del auto-stop como medio de transporte. Casi todos los coches se detienen y están dispuestos a llevar si se para a la salida de un asentamiento, ya que la mayoría de ellos son defendidos por soldados de Tzáhal. Sin embargo, sólo es seguro viajar a dedo entre los asentamientos o ciudades judíos, o algunos pocos empalmes bien conocidos y protegidos; cualquier otra área se considera especialmente peligrosa – en otros tiempos, viajeros a dedo israelíes fueron secuestrados y asesinados por los árabes mientras esperaban algún aventón. Hacer dedo a través de Cisjordania es fácil y divertido – los palestinos locales se ponen contentos de poder ofrecer un aventón a cualquier persona que no sea colono.