El presidente de la Comisión de Exteriores y Seguridad del Parlamento israelí, Avigdor Liberman, advirtió que la organización terrorista libanesa Hezbolá «posee armas con las que podría atacar cualquier punto de Israel».Liberman indicó que, «ante las amenazas del eje radical - en referencia a Hezbolá, Irán y Siria - se necesita perseverancia y decisión», según informó el Canal 2 israelí.
Asimismo, el ex ministro de Exteriores subrayó que Irán «está avanzando a un ritmo frenético hacia la consecución de una bomba atómica». Por último, valoró que «está claro que el presidente sirio, Bashar al-Assad, utilizó armas químicas en su lucha contra los grupos opositores armados».
Liberman dimitió como ministro de Exteriores en el marco del juicio contra él por fraude y abuso de confianza, si bien el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, que ocupa el cargo en la actualidad, expresó que le reintegrará al frente de la cartera en caso de que sea absuelto.
El Ejecutivo de Netanyahu mostró en varias ocasiones su preocupación ante la posibilidad de que el Gobierno sirio transfiera armamento avanzado a Hezbolá, así como ante la opción de que Al Assad pueda perder el control de las armas químicas que tiene Siria.
Según medios extranjeros, aviones de combates israelíes atacaron Siria al menos en tres ocasiones este año para destruir lo que fuentes de Inteligencia afirman que eran misiles avanzados antiaéreos y tierra-tierra que iban a ser entregados a Hezbolá.
La organización terrorista libanesa mantiene durante el conflicto en Siria su apoyo a Al Assad y aboga públicamente por una resolución política del conflicto y por la introducción de reformas democráticas en el país.
Sin embargo, el vicepresidente del consejo ejecutivo de Hezbolá, Nabil Kauq, manifestó a finales de abril que la intervención de la organización en el conflicto sirio «es un deber nacional y moral para la defensa de los libaneses que residen en las localidades fronterizas».
El pasado sábado, el secretario general de Hezbolá, el jeque Hassan Nasrallah, aseguró que su grupo está dispuesto a asumir «todos los sacrificios y consecuencias de su implicación en el conflicto sirio» y denunció «la guerra política y económica lanzada contra el Gobierno de Al Assad».
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos cifró en 140 el número de miembros de Hezbolá muertos en los últimos meses en los combates registrados en las provincias sirias de Reef Dimashq y Homs, 99 de ellos en la batalla por la ciudad de Al Qusair.
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