La petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y la Corporación General del Petróleo de la Autoridad Palestina (AP) firmaron en Caracas un contrato para el suministro de combustible a través de la nueva compañía Petropalestina.

El contrato fue firmado aprovechando la tercera visita del presidente de la AP, Mahmud Abbás, a Venezuela y en él se estipuló un primer cargamento «de 240.000 barriles de diesel y crudo en cantidades a definir posteriormente».

Esto «permitirá concretar el suministro de Venezuela a Palestina del diesel que necesita en su economía. Ha nacido Petropalestina que es la alianza entre PDVSA y Palestina y vamos a consolidarla», afirmó el presidente venezolano, Nicolás Maduro, presente al igual que Abbás en la firma del acuerdo.

«Gracias a Venezuela por apoyar a Palestina, por ayudar a romper el monopolio de Israel a nuestra economía», señaló por su parte el presidente de la AP.

Abbás también recibió el apoyo de Venezuela para ingresar como miembro observador a la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

«Nosotros le vamos a hacer una invitación especial a Palestina para que se incorpore como observador especial en los mecanismos de cooperación Petrocaribe y ALBA para que así pueda también participar de todos los mecanismos de cooperación», declaró Maduro.

Durante el encuentro también fue firmado un acuerdo para «fomentar, desarrollar y mejorar la cooperación para evitar la doble tributación y prevenir la evasión fiscal», indicó.

«Avancemos en todos los temas económicos con esta comunidad árabe palestina. Ya basta que se pretenda convertir a Palestina en un Estado invisible», agregó Maduro y aprovechó la ocasión para felicitar a Abbás por su gestión.

Por su parte, Abbás condecoró a Maduro con la «Estrella Palestina», y éste le retibuyó imponiéndole la «Orden Francisco de Miranda» de primera clase.

El fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez, apoyó la creación de un Estado palestino desde su llegada al poder en 1999, y en abril de 2009, cuatro meses después de haber roto relaciones con Israel por la operación «Plomo fundido» en Gaza, formalizó el establecimiento de relaciones diplomáticas con la apertura de una embajada palestina en Caracas.

Tras la muerte del líder bolivariano, Abbás ofreció sus condolencias al pueblo y al Gobierno de Venezuela, al tiempo que destacó que los palestinos habían perdido «a un amigo que defendió de forma apasionada su derecho a la libertad».


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