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¿Empatar o ganar?

empate2El año 2014 ha llegado a su fin con un empate estratégico sobre los principales frentes que Israel está tratando.

En el frente iraní, el programa nuclear se ha congelado. En el proceso diplomático vis-à-vis la comunidad internacional se encuentra todavía en un punto muerto.

A pesar de las preocupaciones de Israel de que se alcanzaría un mal acuerdo, de que el régimen de sanciones se derrumbaría o de que los iraníes podrían hacer un gran avance en secreto hacia una bomba nuclear, el año terminó sin grandes cambios.

En el frente palestino, otro intento norteamericano ambicioso para resolver el conflicto fracasó, dejando a israelíes y palestinos en un status quo que también refleja un empate estratégico.

La guerra contra Hamás el verano pasado terminó sin un militar cambio real o político alguno. Hasta el momento, los temores de una Intifada en los territorios de la Autoridad Palestina (AP) o en Jerusalén también han demostrado ser falsos.

En el frente norte, la sangrienta guerra civil en Siria ha llegado a un empate estratégico entre el régimen y los rebeldes. Mientras que el presidente sirio Basharal- Assad ha reforzado su control sobre Damasco y las zonas alawitas con la ayuda de Rusia, Irán y Hezbolá, los kurdos controlan su área y los sunitas están dominando amplias zonas a través de sus diferentes organizaciones.

Desde la perspectiva israelí, 2014 terminó con los Altos del Golán sin ser una plataforma de acciones contra Israel, y no hay amenaza estratégica de la yihad global en general y del Estado Islámico (EI) en particular.

Algunas personas predijeron que el EI se expandirá en la región como una enorme ola imparable, pero se ha frenado. El EI no cruzó las puertas de Bagdad, no conquistó las zonas chiítas y kurdas de Irak y no se extendió a Jordania.

Aunque la coalición internacional liderada por Estados Unidos no destruyó a la organización, de acuerdo con el objetivo estratégico definido por el presidente Barack Obama, parece haber ayudado a frenar su avance. También en este frente estamos viendo un empate estratégico.

Entonces, ¿qué se viene en 2015?

La amenaza más seria potencial fue y sigue siendo la nuclearización de Irán. Las conversaciones entre Irán y las potencias mundiales continuarán en los próximos meses hasta que alcancen su fecha límite en junio de 2015.

El punto muerto en Siria y en la guerra contra el EI está implicando a Turquía como un jugador clave que podría enviar considerables fuerzas militares a la zona e inclinar la balanza.

Hasta el momento, las condiciones de Turquía para unirse a la coalición internacional han sido un compromiso estadounidense de trabajar para sustituir el régimen de Al Assad y evitar la creación de un Estado kurdo, pero son condiciones que Estados Unidos ha rechazado.

En el frente libanés, después de siete años tranquilos de Hezbolá gracias a la eficaz disuasión israelí, estamos viendo signos iniciales de una escalada, aumentando las preocupaciones.

En el frente palestino, Israel debe garantizar que una futura guerra contra Hamás no vaya a terminar en otro empate, sino en una clara victoria para nosotros, a pesar de que una nueva escalada de violencia no es el mejor interés de Hamás en estos momentos.

Un mayor riesgo se refleja en los movimientos diplomáticos de la APalestina en Europa y en la ONU, lo que probablemente dará lugar a una batalla diplomática significativa en 2015.

La concepción estratégica en las relaciiones entre la Administración estadounidense y el Gobierno israelí puede llegar a su fin, y no necesariamente para bien. El presidente Obama está en el final de su mandato, y ya ha demostrado que está dispuesto a dar pasos significativos que no coinciden con la postura del Congreso.

A pesar de un año dinámico para Israel, se puede resumir como un año de indeterminaciones, de un año de status quo y de un bloqueo en la mayoría de los frentes.

En 2015 debemos formar una política diferente, integral e iniciar y llegar a nuevas soluciones para los retos del futuro.

* Amós Yadlin es director del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional (INSS) de la Universidad de Tel Aviv y se desempeñó como jefe de Inteligencia Militar de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

Fuente: INSS
Traducción: www.israelenlinea.com