Al Dr. Riyad el-Malki no es fácil ubicarlo estos días. Como jefe de la diplomacia palestina, no cesa de viajar, intentando garantizar apoyo a la iniciativa que la Autoridad Nacional Palestina piensa lanzar el próximo 20 de septiembre en la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Hace poco volvió de una gira por Perú, Venezuela, Cuba, México y varias islas del Caribe y tan solo unos días después de retornar a Ramallah, volvió a partir hacia El Salvador con la esperanza de poder hablar ante CARICOM o de intentar, al menos, reunirse fuera de la cumbre con todas las delegaciones.

Logramos ubicarle cuando aterrizaba en el aeropuerto de Ammán, Jordania, desde donde seguía viaje a Centroamérica. Este es un resumen del diálogo mantenido con el ministro de Exteriores de la ANP.

Es importante señalar que esta entrevista fue realiza antes de la escalada de violencia desatada hace dos semana por el atentado terrorista en el camino a Eilat.

- Hace mucho que se habla del planeado pedido unilateral palestino a las Naciones Unidas. Sería bueno aclarar de qué se trata exactamente.
- Debo comenzar diciendo que nosotros vamos a ir a las Naciones Unidas porque hemos llegado a la conclusión de que no hay posibilidad de renovar las negociaciones, porque hemos perdido la esperanza con el actual gobierno israelí, que ha mostrado desde hace dos años que no está interesado en volver a negociar.

- La Autoridad Palestina e Israel se acusan mutuamente del estancamiento...
- Pero no es cierto presentarlo así. No es verdad. Nosotros estuvimos siempre dispuestos a renovar las negociaciones, pero los israelíes no. Netanyahu fue quien dijo "no" a las líneas del 67. Entonces, no es correcto que las dos partes tienen responsabilidad por la falta de negociaciones. Israel es responsable por la falta de negociaciones hoy en día.
Nosotros estamos dispuestos a negociar y es Israel quien no ha querido hacerlo, al seguir construyendo asentamientos y tomando medidas unilaterales. No tiene interés en negociar seriamente, con responsabilidad, para acabar con la ocupación y permitir establecer un Estado palestino independiente al lado del Estado de Israel en el territorio ocupado de 1967, con Jerusalén Oriental como capital. Por eso, hemos decidido que es tiempo de llevar el tema finalmente a las Naciones Unidas. Y la ONU debe buscar una solución a ello, ya que esta no ha sido posible a través de las negociaciones.

- ¿Y cuál será exactamente el pedido?
- Iremos a las Naciones Unidas a pedir justicia para los palestinos, a ver cómo puede reaccionar la comunidad internacional a la petición palestina para reconocer a un Estado independiente palestino según la visión de los dos Estados. Ahí, con un Estado palestino independiente, se puede volver a las negociaciones con los palestinos. Ahí, vamos a volver como un Estado, negociando con el Estado israelí, mientras el Estado de Israel estará ocupando al Estado palestino. Y según las leyes internacionales Israel debe negociar y buscar una salida pacífica que permita recuperar el territorio ocupado del Estado palestino.

- ¿Qué opciones están considerando? ¿La Asamblea General o el Consejo de Seguridad?
- Tenemos las dos puertas. Vamos a decidir en cooperación y coordinación con nuestros hermanos árabes, y en coordinación con todos los amigos en la comunidad internacional, cuál es el camino más lógico y más seguro que pueda llevarnos en forma directa a ese Estado palestino independiente. Pero no diremos antes qué decidimos.

- ¿Serán pedidos distintos, según la instancia a la que decidan dirigirse?
- Si vamos a la Asamblea General, vamos a pasar una resolución en la que se reconoce al Estado palestino y se apoya que éste sea admitido en las Naciones Unidas y eleva el estatuto de Palestino al del Estado palestino, permitiendo que ese Estado palestino pueda integrarse a todos los organismos de la ONU. Esto, si vamos a la Asamblea General. Si vamos al Consejo, vamos a presentar una petición a nombre del Estado palestino, pidiendo que sea admitido como Estado miembro de las Naciones Unidas.

- ¿Algo podría cambiar de cara a septiembre?
- Todo depende también de qué va a pasar desde ahora hasta ese momento, el 20 o 21 de septiembre. Esperamos que haya iniciativas serias creíbles por parte de la comunidad internacional, el cuarteto, en las que nos puedan ofrecer algo muy serio para poder renovar las negociaciones con los israelíes, con claros términos de referencias, fechas claras y objetivos claros sobre qué sacaremos al final.
Si resulta eso, la vamos a estudiar en forma seria y la vamos a discutir. Y si hasta el día 20 no habrá ninguna iniciativa de ese tipo, no tendremos más alternativa que , cuando llegaremos a las Naciones Unidas, decidir qué puerta vamos a tocar: la de la Asamblea General o la del Consejo de Seguridad.

- Más allá del peso político diplomático que tendría un reconocimiento en la ONU ¿qué importancia práctica tendría esto? ¿Habría que algo que iría más allá de sentir que tienen apoyo internacional?
- En la práctica tal vez no haya ningún cambio, porque Israel no va a reconocer un cambio en las Naciones Unidas y va a continuar como país ocupante del Estado de Palestina. Israel puede mantener su control militar en todas partes del territorio ocupado palestino. Eso sí es cierto. Pero al mismo tiempo, el reconocimiento sería algo muy importante para nosotros, los palestinos, si el Estado palestino puede ser miembro de todos los organismos de las Naciones Unidas.
Si podemos entrar a la Corte de Justicia internacional, a la UNESCO, etc, podemos defender ahí nuestros derechos contra la ocupación militar israelí y podemos presentar el caso palestino ante los organismos internacionales. Y eso haría que traten a Palestina como un Estado y nos haría posible pedir intervención por parte de la comunidad internacional. Entonces habría un cambio en este sentido, aunque no haya ningún cambio en el terreno. Al contrario, creo que Israel va a intensificar su agresión para mostrar a la población palestina que su logro internacional en las Naciones Unidas resultará en más sufrimiento para el pueblo palestino.
Creo que esa mala visión y mala interpretación por parte de Israel, significaría a largo plazo un deterioro en las relaciones entre el Estado palestino y el Estado israelí.

- ¿Qué medidas prácticas están tomando de cara a septiembre?
- Tenemos un comité político encabezado por Yasser Abed Rabbo para organizar todo. Estamos visitando muchos países en diversas partes del mundo, para recibir el reconocimiento y también para estar bien informados sobre la posición de cada uno en cuanto a su postura en la votación en las Naciones Unidas. Estamos ahora preparando apoyo a nivel internacional, no solamente por parte de parlamentos y partidos políticos sino también de movimientos de masas.

- ¿No habrá violencia en el terreno?
- No, no, claro que no habrá violencia para nada. Podemos asegurarlo. Por parte de la Autoridad Palestina hemos dejado muy claro que no vamos a perder esta oportunidad histórica. No vamos a entrar en un acto violento porque eso nos hace perder el caso. Somos conscientes de la importancia de mantener la seguridad y el control en el terreno palestino.
Lo vamos a demostrar como lo hemos hecho en los últimos cuatro años. Vamos a seguir trabajando con normalidad, pero habrá por supuesto apoyo popular en la calle palestina como por parte, también, de todos los pueblos en diferentes países y capitales del mundo.

- Algo clave, según el Derecho internacional, erigir un Estado es tener control efectivo del territorio. Pero la Autoridad Palestina controla sólo Cisjordania mientras que la Franja de Gaza está bajo gobierno de Hamas. ¿No es éste un problema?
- No. He leído muy bien la Convención de Montevideo, que habla de cuatro principios: terreno, pueblo, gobierno y relaciones internacionales. Nosotros podemos confirmar que tenemos todos los atributos del Estado.

- Con Gaza hay un problema muy concreto...
- Con eso no tenemos ningún problema. Hay muchos países que han sido admitidos con conflictos internos, que no impidió la admisión. Hay otros que fueron admitidos sin una clara frontera, como el propio Israel. No creo que Palestina será una excepción.

- Pero la reconciliación interna parece no avanzar. ¿Eso no le preocupa?
- No; no me preocupa nada porque hemos llegado a firmar un acuerdo hace dos meses y ahora hemos empezado la implementación del mismo. Entonces, podemos ir a Nueva York con el entendimiento de que hay un acuerdo que está ahora en proceso de ser implementado, tanto por parte de Al Fatah como de Hamás. Entonces, no creo que eso va a obstaculizar nuestro esfuerzo de ir a las Naciones Unidas.

- Imagino que no ve usted a la Autoridad Palestina volviendo a gobernar la Franja de Gaza.
- Es que hay un entendimiento sobre cómo eso se va a llevar. Será parte de un acuerdo controlado por la Autoridad Palestina.

- Sr. Ministro, casi todos los países de América Latina les han prometido su apoyo. ¿Cómo ve usted las posturas de Chile y Colombia?
- Todavía estamos hablando con Chile. Esperamos que votará a favor de la posición palestina. No hay ninguna decisión final por parte de Chile. Esperamos que allí el reconocimiento del Estado palestino se traduzca en un apoyo en las Naciones Unidas. No tenemos ninguna duda de la posición chilena. Hay una comunidad de origen palestino en Chile trabajando ahí para asegurarla. Respecto a Colombia, le diré que ha sido el único país de América del Sur que no ha reconocido el Estado palestino pero eso no significa que no tengamos buenas relaciones con él. Las tenemos. Y ahora estamos intentando trabajar con el parlamento colombiano, con las organizaciones de masas en Colombia para también ver exactamente qué posición tendrá el gobierno colombiano en cuanto al tema actual.

- Muchas gracias por su tiempo y buen viaje.
- Gracias a usted.

Fuente: Semanario Hebreo de Uruguay