El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, prometió que hará «todo lo posible para ampliar nuestro gobierno a causa de los grandes desafíos que tenemos por delante».
El mandatario hebreo efectuó estas declaraciones ante los 30 diputados de su partido, el Likud, en el Parlamento de Israel en Jerusalén.
Netanyahu se comprometió a colocar a Israel en una posición diplomática más fuerte y a trabajar para reducir el costo de vida.
«Con la ayuda de Dios, el nuevo gobierno que se formará en los próximos días va a durar mucho tiempo, mucho más tiempo que el anterior», afirmó.
El diputado opositor, Itzjak Herzog, a quien Netanyahu venció en las elecciones generales, aseguró que la coalición que lidera, el Grupo Sionista (laboristas y Hatnuá) no se unirá al ejecutivo sino que lo cambiará.
«El fracaso del primer ministro con la improvisación de este gobierno hace necesarias unas nuevas elecciones», dijo.
«Ya pasaron dos meses, y Netanyahu todavía no es capaz de formar un gobierno que gane la aprobación del Parlamento», añadió Herzog, aunque el primer ministro se aseguró el apoyo de 61 diputados - la mitad más uno - con la nueva coalición.
«Ahora tenemos una oportunidad única, como un bloque político fuerte y grande para evitar que haya en Israel un gobierno horrible», señaló Herzog.
El líder del Grupo Sionista indicó que está invirtiendo en la posibilidad de formar un gobierno alternativo al de Netanyahu.
«No se equivoquen. Estoy hablando de un gobierno encabezado por mí, porque viendo este Parlamento y esta constelación política, soy el único capaz de formar una nueva coalición», subrayó.
Herzog consideró que el nuevo gabinete de Netanyahu no durará mucho tiempo porque tiene una mayoría de diputados demasiado justa.
La primera prueba de Netanyahu en el Parlamento será conseguir aprobar una enmienda a la Ley Fundamental que daría la posibilidad de ampliar el número de ministros del gobierno. Actualmente, no pueden ser más de 18 y Netanyahu quiere 20.
La Corte Suprema rechazó una petición para bloquear esta enmienda que fue presentada por el partido centrista Yesh Atid que lidera el ex ministro de Finanzas Yair Lapid.
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