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Israel: Desarrollan combustible alternativo sin petróleo

Moti HerskowitzUn grupo de investigadores de la Universidad Ben Gurión avanza en la producción de un nuevo combustible sin petróleo a base de hidrógeno y dióxido de carbono, que espera comercializarlo dentro de una década.

«Este nuevo proceso se convertirá en la tecnología dominante por la cual se produce el combustible líquido», explicó el profesor Moti Herskowitz, quien desarrolló el proceso junto su colega, Merón Landau, la doctora Roxana Vidruk y un equipo del Centro Blechner de Catálisis Industrial y Desarrollo de Procesos de la mencionada universidad localizada en la ciudad de Beer Sheva, al sur de Israel.

«El mundo necesita una variada fuente de combustibles alternativos sostenibles, porque el petróleo crudo tiene disponibilidad limitada y convertirlo en combustible líquido causa un daño significativo a la atmósfera, mientras que las alternativas actuales no están prosperando», indicó Herskowitz.

«Por ejemplo, la Administración de Información de Energía de Estados Unidos pronosticó que para 2035 los coches eléctricos representarán menos del 5% de las ventas totales», agregó.

Los investigadores israelíes consideran que este desarrollo puede ser la solución a los futuros problemas por la escasez de los combustibles fósiles, ya que no se enfrenta a los mismos obstáculos tecnológicos como los automóviles eléctricos y otras opciones de combustible alternativo, específicamente de producción y la infraestructura de entrega.

El revolucionario combustible es similar en esencia al petróleo crudo sintético, y podría convertirse en un combustible líquido que utiliza la misma tecnología usada para la conversión de crudo sintético; algo que posteriormente sería entregado a las estaciones de servicio usando la infraestructura actual.

Sin embargo, los expertos que participan de la investigación admitieron que todavía faltan algunos pasos para lograr la solución ideal contra el agotamiento del combustible tradicional.

En particular, hablan sobre el eventual desarrollo de la tecnología de división de agua, que tendría que lograr que el costo de producción de hidrógeno sea competitivo con el del gas natural.

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