Una conferencia del prestigioso diseñador israelí Ron Arad y una exposición comisariada por el Design Museum Holón de Israel fueron las actividades centrales del Barcelona Design Festival, que arrancó en Barcelona, con Israel como país invitado.
«Hay que ser responsables y portarse bien con el entorno, intentando superar los límites establecidos. Yo fui un outsider, pero en aquella época Londres era un desierto, si hubiera ido a Milán todo hubiese sido distinto», aseguró Arad, rodeado por los trabajos que el Design Museum de Holón, el primero dedicado al diseño de Israel, seleccionó para la muestra, todos muy innovadores y a la vez anclados en las tradiciones ancestrales judías.