Israel es un país pequeño, de casi 8 millones de habitantes, pero puntero en innovación tecnológica. Prueba de ello es que el Estado hebreo dispuso en el Mobile World Congress (MWC), llevado a cabo en Barcelona, de uno de los pabellones más grandes de la muestra.

Más de un centenar de empresas israelíes estuvieron representadas y, de ellas, más de 60 dispusieron de stands propios. Se trata de una cifra récord de participación, equivalente al 15% del total del congreso.

El embajador de Israel en España, Alón Bar, cree que existe un gran potencial para los intercambios y las relaciones comerciales y de cooperación con España en este ámbito.

«La flexibilidad exportadora y la innovación tecnológica constituyen una de las bases de la economía y en eso Israel tiene mucha experiencia«, subrayó el diplomático que, junto a la agregada de asuntos económicos y comerciales, Yifat Alón, dialogaron con la prensa durante el trancurso de la muestra.

Por su propia idiosincrasia, la sociedad israelí está siempre muy abierta a las novedades y su mercado interior es un mercado en permanente cambio. Su sistema y su mentalidad es muy favorable a los emprendedores. Se trata del segundo país del mundo con más capital riesgo, después de EE.UU. Pero, al tratarse de un país pequeño, su mercado interior es también limitado por lo que las empresas israelíes dependen mucho de la exportación y de la colaboración con otras compañías.

«Creemos que España, que desea un crecimiento que no esté basado sólo en el turismo o la construcción, sino que busca la innovación, ofrece oportunidades», señaló Yifat Alon. «Nuestra impresión es que Israel puede ser un socio muy interesante para las empresas españolas», aseguró el embajador Bar, que reconoció que en España existe un desconocimiento de la realidad israelí que no se da en otros países europeos.

La tecnología de las comunicaciones constituye uno de los sectores - junto a las energías renovables o la tecnología del agua que persigue la eficiencia energética - con mayor potencial.

Un dato avala el milagro tecnológico israelí. Es el país del mundo con mayor porcentaje de ingenieros: 130 por cada 100.000 habitantes, frente a los 85 por cada 100.000 de EE.UU.

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