La Oficina para la Coordinación de los Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) ofreció un recuento de fallecidos en el conflicto en Oriente Medio durante 2015, que asciende a 170 palestinos y 26 israelíes, en ataques y enfrentamientos en Israel y Cisjordania.
El 83% (141) de los muertos palestinos, y el 85% (22) de las víctimas israelíes se registraron en la actual ola de violencia, que se inició el pasado 1 de octubre.
La Oficina de la ONU publicó los datos desde comienzos de año hasta el 28 de diciembre.
El informe precisó que alrededor del 63% de los decesos palestinos desde esa fecha fueron de terroristas autores de atentados contra israelíes.
La OCHA también cifró en 15.377 los heridos palestinos y en 350 los israelíes, durante el año que concluye.
En torno al 90% de los heridos palestinos se registraron en Cisjordania y Jerusalén Este, en su gran mayoría durante manifestaciones y enfrentamientos.
Alrededor del 56% de los damnificados lo fueron por inhalación de gas lacrimógeno que requirió intervención médica; el 25% resultó herido por balas recauchutadas; el 14%, por fuego real y el resto por agresiones físicas u otro tipo de lesiones.
El informe sobre 2015 recoge que 530 estructuras palestinas fueron destruidas por las autoridades israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este, provocando el desplazamiento de 742 palestinos, y afectó a otras 2.600 personas.
La mayor parte de estas infraestructuras fueron destruidas por la falta de permisos de construcción emitidos por las autoridades israelíes.
Y un total de 19 viviendas de familiares y residencias vecinas de terroristas palestinos que cometieron atentados contra israelíes fueron destruidas por Israel por razones punitivas.
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